lunes, 18 de mayo de 2015

Networking ¿Es realmente una moda?

Antes de nada debo decir que no soy nada amigo de los anglicismos, stakeholders, coworking, networking,…; mucho menos aún teniendo un idioma tan rico como el español, pero muchas veces es “peor el remedio que la enfermedad”, vamos que cualquier coincidencia de la traducción con la realidad es pura ficción.

Hace unos meses me invitaron, como gerente de Plataformas Ber, S.L., ha participar en un nuevo grupo de Networking que se iba a formar en Valladolid bajo el paraguas de la entidad BNI, el planteamiento fue bueno pero era hora de valorar pros y contras, y la balanza se decantó por participar de forma activa y desde el principio en su formación, y así el pasado día 29 de abril se realizó el lanzamiento del grupo “BNI Soluciones” y fue todo un éxito por la participación y asistencia.

Independiente de la definición que se le pueda dar así como la participación o no en uno de estos grupos, que es verdad tiene sus ventajas pero supone un trabajo añadido, deberíamos ser conscientes de la importancia para nuestro negocio del Networking, que no es un concepto tan nuevo como muchos piensan y que si bien el nombre puede variar con el tiempo, lo que si permanecerá es el concepto y su necesidad.



No es la primera vez que le ponemos nombre a nuestra forma de trabajo, ya lo hicimos hace tres años cuando apostamos por documentar nuestro sistema de Responsabilidad Social Empresarial, y definir el centro de nuestro negocio: “Nuestros grupos de interés”.

Los negocios con futuro son los que generan confianza y credibilidad, y esto solo es posible:

  • Con personas que tienen valores y apuestan por la empresa en la que trabajan
  • Con proveedores que añaden valor a nuestro negocio, y que estamos dispuesto a recomendar porque van a dar una buena imagen nuestra.
  •  Con clientes a los que escuchar e intentar cumplir con sus expectativas
  •  Con un entorno social que nos apoya y al que contribuir en su desarrollo
  •  Cuidar el medio ambiente, del que formamos parte y al que todo debemos.


 Y es que, como decía Margaret Wheathey:

“No hay nada como las relaciones. En el universo, cada cosa está relacionada con todas las demás. Nada existe de forma aislada, No podemos pensar que somos individuos que pueden hacerse a sí mismos sin ayuda de nadie”