Pues lo prometido es deuda, así que toca hablar de las Plataformas Elevadoras para la realización de trabajos en altura.
Por definición, las plataformas
elevadoras son máquinas móviles, es decir que surgen para facilitarnos el
trabajo.
Son equipos móviles para desplazar personas y sus herramientas manuales hasta
una posición determinada, hacen posible situar un puesto de trabajo en altura
permitiendo a las personas trabajadoras, mediante movimientos de desplazamiento
y elevación accionados desde la propia plataforma, modificar la situación de su puesto en función
de las necesidades existentes y de los tipos de trabajo a realizar.
En lo referente a la legislación aplicable de seguridad laboral a las plataformas elevadoras, debemos tener
en cuenta:
- La obligatoriedad de que dispongan del “marcado CE”, declaración “CE” de conformidad y manual de instrucciones.
- Cuando por su fecha de comercialización o de puesta en marcha por primera vez, no le fuera de aplicación el “marcado CE”, deberán someterse a la puesta en conformidad.
- En cuanto a su utilización:
- El personal operador debe estar cualificado y forma.
- No se permitirá la utilización y el acceso a personas carentes de autorización
- No deberán utilizarse en operaciones o en condiciones contraindicadas por el fabricante y cumplirán las especificaciones establecidas por el mismo en cuanto a su uso y limitación de carga.
- Se debe reconocer previamente el terreno por donde debe desplazarse, asegurando que esté nivelado y sea estable.
- No debe conducirse ni circular por pendientes superiores a las indicadas por el fabricante.
- No se deben cargar materiales de mayor volumen y peso de lo previsto por el fabricante.
- Las cargas deberán estar repartidas uniformemente por el piso de la plataforma.
- Debe verificarse la ausencia de líneas eléctricas aéreas en el entorno así como la presencia de elementos fijos que interfieran el desplazamiento espacial de la plataforma.
Destacaríamos como principales ventajas el ahorro de tiempo en la
realización de trabajos así como en montaje, la adaptación del equipo al
trabajo y no al revés y, por último, la seguridad del personal lo que supone realizar mejor el trabajo y evitar costes de accidentes laborales.